Las granjas avícolas son lugares donde viven y crecen pollos y pavos. Estas granjas funcionan como grandes nichos ecológicos para las aves que están a su cuidado y, a cambio, los granjeros pueden producir los mismos alimentos que los humanos consumen. En cada granja hay un silo: un edificio cilíndrico alto que parece una gigantesca torre de metal.
Todos los días, los granjeros necesitan grandes cantidades de comida para alimentar a sus gallinas. El silo se cierra como una lonchera gigante para mantener la comida de las gallinas segura y seca. ¿Qué pasaría si tuvieras que comer comida mimada o sucia? Las gallinas sienten lo mismo. Un silo bien construido mantiene la humedad afuera, protege la comida del viento e incluso de pequeños insectos que podrían querer mordisquearla.
Hay varios tipos de silos disponibles para que los granjeros seleccionen. Algunos están hechos de un metal súper fuerte que no se oxida. Estas torres de metal tienen la capacidad de almacenar un volumen increíble de alimentos, ¡y algunas pueden almacenar más de 10,000 libras! Eso es el equivalente a cinco vagones estándar llenos de alimento para pollos. Ojalá nunca conozcas ni un ápice de ese tipo de hambre y que nunca imagines tanta comida en un solo lugar.
Para los granjeros, el mantenimiento del silo es crucial. Es como revisar la mochila para ver si todo está limpio, revisar el silo con regularidad. Los granjeros tienen que limpiar los silos para que no crezcan gérmenes dañinos ni moho desagradable en el interior. Un silo limpio mantiene a las gallinas sanas y felices.
Cuando los agricultores tienen un buen silo, pueden comprar alimentos con menos frecuencia, lo que les permite ahorrar dinero y un tiempo precioso. Las aves pueden comer alimentos frescos, limpios y convertibles, que les permitan crecer y ser más fuertes. Algunas gallinas de la granja ponen huevos y otras se crían para que la gente pueda comerlas.
Estas torres mágicas se llaman silos y ayudan a los granjeros a cuidar de sus gallinas. Protegen la comida y garantizan que las aves obtengan todo lo que necesitan para crecer. Sin un buen silo, es difícil mantener sanas a las gallinas.
En realidad, un silo es algo muy importante: es como un gran galpón lleno de carne solo para la comida de las gallinas. Los granjeros trabajan incansablemente e incluso el silo es una de sus herramientas más importantes. Mantiene la comida segura, seca y disponible para que las gallinas la coman.